A ritmo de juegos infantiles, pollitos, vaquitas y cerditos, estos creativos jóvenes llevaron una tarde de diversión y alegría a los niños de la casa hogar de protección, compartieron torta, refrigerio, útiles escolares, y alimentos de la canasta familiar; para hacer posible esta hermosa tarde acudieron a la colaboración de familiares, amigos, compañeros de estudio y trabajo quienes aportaron para esta gran fiesta.
¡Agradecemos a todos los que apoyaron esta grandiosa idea¡